miércoles, 11 de febrero de 2009

Análisis de la imagen

En la clase de medios interactivos se nos fueron presentadas varias imágenes de tipo comercial, creativas, fotos “locas” y una categoría a la cual llamare “fotos descuidadas”. De dichas fotos se nos pidió hacer un análisis y estas fueron mis conclusiones:


· Con respecto a las fotos tituladas por mí como “descuidadas” debo comentar que he notado que dichas fotos son catalogadas y tituladas de esta forma al perturbar la intención de la foto. Por ejemplo recuerdo haber visto fotos de gente posando sonriente, esta claro que la intención de la foto es mostrar de buena forma a los modelos principales pero no esta dentro de la intención mostrar el descuido de terceros… cabe resaltar que en este tipo de fotos los terceros asumen mayor importancia que los principales modelos de la imagen.

· He notado que hay mucho contenido sexual en todos los materiales mostrados, esta es la prueba de que el sexo es un gancho publicitario preponderante en el arte de la atracción y la captación de mensajes. Hay que decir que a pesar de esto, el fin comercial en algunos casos sobrepasa el fin ético de las cosas, hay que ser muy selectivo, teniendo en cuenta la ética y el sentido comercial de lo publicitario, en el momento de promover o hacer campañas de este tipo.

· Es de suma importancia el conocimiento de orden léxico, gramático y ortográfico al momento de diseñar publicidades: cada coma, cada punto, cada error ortográfico… puede resultar costoso para los promovedores de las iniciativas comerciales.

· Quedo en evidencia en una gran cantidad de fotos que los buses, en algunos lugares del mundo, mas allá de ser medios de transporte son también armas de influencia, son pura y vana publicidad ambulante, son medios de transporte promiscuos: al mismo tiempo en que tienen como razón social servirle al público, están tan bien al servicio de la industria.
Las fotos llamadas “locas” son el fruto de la casualidad o del oportunismo del fotógrafo, en la mayoría de los casos es el dolor ajeno lo que intentan transmitir, no hay profundidad ni mucho contenido en sus mensajes, solo importa el valor de la ocasión.
Ricardo Contreras García

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